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El pasado 29 de enero de 2018 se celebró en el auditorio del Mobile World Centre de Barcelona la CEOTalks sobre Blockchain con Alex Puig, Fundador de Alastria: National Blockchain Ecosystem, y director de Digital Currency Summit y Fintech BCN.
En esta ocasión, las startups seleccionadas para el hacer el pitch inicial fueron:
- Brokoli (startup del sector asegurador).
- Techbuddy (una startup que ofrece asistencia tecnológica a particulares).
La trayectoria de Alex Puig como emprendedor
Asesorado por su madre, Alex Puig nos contó, con tono irónico, que estudió telecomunicaciones por vocación. Tras finalizar sus estudios universitarios, viajó a Alemania para trabajar durante un año en temas de I+D con microprocesadores. Posteriormente formó parte de Softonic y tras montar su propia startup, lo dejó todo para vivir en Andorra durante tres años y reencontrarse con la tecnología.
Fue en ese momento cuando, durante un meetup, alguien le comentó la existencia de la tecnología blockchain (empleada en aquel momento en la configuración del bitcoin).
Alex Puig se define a sí mismo como un «solucionador de problemas» en temas tecnológicos y muy tenaz en el uso de una determinada tecnología: el blockchain.
Reconoce que no fue nada fácil comprender la tecnología blockchain, y tuvo que estudiar el código fuente del bitcoin durante varios meses para entender su funcionamiento. Tras dedicar todos sus esfuerzos al potencial de esta tecnología, decidió organizar en Androrra una conferencia sobre bitcoin a la que acudieron a penas 30 personas (muchas de las cuales actualmente lideran los principales proyectos blockchain a nivel nacional).
Desde entonces, decidió crear una asociación denominada Digital Currency Summit a través de la cual organiza eventos sobre tecnología blockchain alrededor del mundo.
Durante todo este tiempo, Alex Puig ha compaginado su trabajo como organizador de eventos con la creación de aplicaciones tecnológicas para grandes empresas nacionales. Fruto de estas colaboraciones nació Alastria: National Blockchain Ecosystem, un consorcio semiprivado de blockchain a nivel nacional que actualmente cuenta con más de 150 de las empresas más importantes del país. Se trata del consorcio consectorial más grande del mundo.
Por estatutos, Alastria sólo puede trabajar en identidad digital (salfe sovereing identity) y su objetivo fundamental es devolver los datos al ciudadano a través de la tecnología blockchain.
Para Alex Puig, los datos personales son un derecho básico universal, no un modelo de negocio al servicio de grandes compañías tecnológicas.
El objetivo de Alastria es tener una plataforma nacional regulada que permita solucionar problemas tecnológicos a pequeñas y medianas empresas. Alastria se presenta como un bien social.
«La mayoría de empresas no pueden entrar en blockchain porque se encuentran con limitaciones legales.» Alastria se encarga de buscar soluciones para que eso no suceda.
¿Para qué sirve el blockchain?
Según Alex Puig: «El blockchain, por defecto, es una base de datos abierta«
Lo que consigue el blockchain es replicar en el mundo digital algo que tenemos en el mundo real, transaccionar valor sin acudir a un intermediario. «Blockchain es una red peer to peer de intercambio de valor, con un añadido: yo puedo programar este valor y darle la funcionalidad que a mi apetezca», asegura Alex Puig.
En el intercambio de valor puedes «tokenizar» (representar euros en blockchain) y marcar esos tokens, es decir, determinar el volumen de tokens que podrán gastarse en una determinada actividad (por ejemplo, en temas ecológicos).
A la pregunta sobre el estado actual de la tecnología, Alex Puig afirmó que «el blockchain es una tecnología, a nivel tecnológico, muy madura«.
«Lo que necesita ahora el blockchain es usabilidad y diseño. Gente creando aplicaciones que tengan sentido. No gente haciendo ICO’s»
¿Qué es «tokenizar»?
Tokenizar es representar en blockchain la propiedad de un bien mediante un código criptográfico. Mediante la tokenización de la identidad digital, el ciudadano tiene en su poder todos sus datos y no tiene la obligación de compartirlos permanentemente. El sistema se basa en «claims» y certificados emitidos por las empresas que componen la red.
Por ejemplo, si quiero acceder a un edificio, no es necesario que enseñe mi DNI. «Con el blockchain de Alastria podrías acceder a ese edificio a través de un token generado por alguna de las entidades que componen la red, de manera que me autoricen a entrar ese día a esa hora» asegura Alex Puig.
Segun Alex Puig: «El blockchain dará forma a muchos modelos de negocio nuevos». «Muchas aplicaciones trabajarán sobre blockchain y nadie lo sabrá.»
Sobre las ICO’s, Alex Puig piensa que los tokens deben tener un sentido. Si el token no tiene una utilidad práctica o realmente no tiene un valor asociado, la ICO carece de sentido.
Por ello, «si lo que quieres es crear un token para levantar pasta, vete a un sector más tradicional», asegura Alex Puig. Además, no podrás hacerlo en España, lo tendrás que hacer en Gibraltar, Suiza, etc.
«Montar una ICO no es tan fácil. Según la última reunión que mantuve con la CNMV, es posible crear una ICO con un token security cuando el capital es inferior a 5 millones y siempre que existan menos de 150 inversores, entre otras limitaciones».
¿Qué es un «smart contract»?
Para Alex Puig un «smart contract» no deja de ser un programa informático tradicional que se instala en un ordenador global con un sistema operativo compartido: el blockchain.
Aspectos legales de la tecnología blockchain
Alex Puig reconoce que el principal problema que se ha encontrado Alastria, no es el apartado tecnológico, sino el aspecto normativo. El blockchain soluciona un problema internacional en una sociedad que realmente no es internacional. Por lo tanto, afirma, si queremos actuar sobre cada una de estas naciones y tener aplicaciones que funcionen de manera adecuada, no tenemos mas remedio que respetar la ley.
«Entonces, en lugar de pensar en tecnología debes pensar en regulación. De esta manera, tras conocer la regulación, debes estudiar qué tecnología podría aplicarse a esa regulación«, afirma Alex Puig.
Según Alex Puig, a diferencia de Gibraltar, España es un país reactivo con barreras permanentes. «En España damos por hecho que todo el mundo es muy malo y regulamos contra esta gente tan mala en lugar de regular para crear proyectos que puedan ayudar a la sociedad».
«Nuestros datos son la moneda de cambio de las empresas. No tenemos ningún control sobre ellos». El blockchain, a través de la identidad digital, busca solucionar ese problema y lucha por devolver la propiedad de los datos a los ciudadanos.
En definitiva, la charla con Alex Puig tuvo un componente práctico muy importante. Desde Delvy trabajamos para ofrecer un servicio formativo constante dirigido a todos nuestros clientes. Esperamos profundamente que esta conferencia haya servido de utilidad para los asistentes.
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