¿Qué es un modelo Saas?
La invención de internet hizo posible el desarrollo posterior de la computación en la nube y de sus servicios asociados. Este suceso hizo posible la integración de muchos modelos de negocio en este instrumento que ofrece la tecnología 2.0, el Saas (de las siglas en inglés software as a service).
El modelo SaaS se trata de un modelo de distribución de software en el que un proveedor de servicios aloja aplicaciones para clientes y las pone a su disposición a través de internet. Mediante un modelo de pago por suscripción (la gran mayoría de veces), obtienes un servicio o producto alojado en la nube.
El propósito de este recurso tecnológico es proveer programas a los consumidores de manera fácil, efectiva y remota, sin la necesidad de instalar ningún tipo de archivo para hacerlo funcionar.
Ejemplos de éxito reconocido de este modelo son Netflix, plataforma de reproducción de películas fundada en 1997 por Reed Hastings y Marc Randolph que obtuvo 29.700 millones de dólares en ingresos 2021; o Spotify, plataforma de reproducción de música fundada en 2006 por Daniel Ek con 400 millones de usuarios activos en 2021.
¿Cómo se mide el rendimiento de un modelo SaaS?
Para medir su actividad, las empresas miden indicadores clave de rendimiento (KPIs). En el caso del SaaS, las métricas para hacerlo son las siguientes:
- Crecimiento
- Retención
- Eficiencia de Ventas
- Margins
- Capital Eficiency
- Engagement
Si deseas más información, en nuestro blog puedes encontrar un artículo específico sobre los KPIs Saas.
Ventajas del modelo SaaS
- La modalidad de pago por uso hace que tenga un coste predecible. Además, éste se ajusta a cualquier economía.
- Puede integrarse prácticamente con cualquier dispositivo, lo que te permite el acceso a su gestión desde cualquier lugar y en cualquier momento.
- Adaptabilidad para cubrir las necesidades del cliente, aumentando su eficiencia y logrando una personalización adecuada.
- Garantiza la continuidad del negocio ante cualquier suceso imprevisto como por ejemplo una falla en el proveedor, minimizando el tiempo de inactividad y la pérdida de productividad.
El principal motivo de fracaso de las startups es la escasez de caja para poder seguir desarrollando su actividad. Como consecuencia, se encuentran con la necesidad de obtener financiación para evitar un potencial concurso de acreedores y poder alcanzar el mayor crecimiento y en el menor tiempo posible de la compañía. Por ello, es imprescindible la presencia de un buen CFO (director financiero) que sepa medir correctamente esta información para exponerla posteriormente a potenciales inversores.
Sobre Delvy
En Delvy somos un equipo de abogados y asesores financieros especializados en emprendedores y startups. En Delvy ayudamos y asesoramos a negocios tecnológicos e innovadores en cualquier fase del negocio con el objetivo de garantizar su éxito en los diferentes procesos en los que participamos.
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